Contaminación del agua difusa de nitrógeno y fósforo

El problema del nitrógeno y del fósforo

Es una realidad manifiesta que uno de los mayores riesgos para nuestras masas de agua es la Contaminación del agua difusa de los nutrientes (nitrógeno y fósforo) procedentes del sector de la agricultura.

Una medida a tomar podría ser imponer un impuesto ecológico a los fertilizantes, que iba directamente al origen de la contaminación. Otra sería asignar un precio nacional de 0,3 €/m3 de agua suministrada a los regantes que vendría a cumplir con la máxima de «quien contamina paga”.




Pues bien, el IIAMA (Instituto de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente) de la Universidad Politécnica de Valencia evalúa, en su último informe, qué medidas son más efectivas para mejorar el estado ecológico del Mar Menor. Entre ellas, destaco:

“En cuanto al nitrógeno (N) presente en el suelo y que contamina los acuíferos, el estudio demuestra que aplicando solamente lo establecido en el Decreto-Ley 1/2017, que marca la cantidad necesaria de fertilizante a aportar en función del tipo de cultivo, es posible reducir el volumen de nitrógeno que alcanza la laguna en un 35 %, “por lo que no sería necesario reducir el número de rotaciones de cultivos y con ello, la producción de tres a dos cultivos anuales, ya que mejora los resultados sólo ligeramente”».

CONTAMINACIÓN DIFUSA

Elementos importantes a tener en cuenta en la contaminación de nuestros ríos y suelos debido a vertidos y otras actividades como la ganadería y la agricultura. La información analizada proviene de datos del SIA (Sistema Integrado de Información del Agua).

Si se aplica más fertilizante que el necesario, la razón es obvia:

“El precio del producto es bajo y no compensa adoptar medidas para optimizar su consumo”.

Fuente: iagua.es